Protocolo de uso

El procedimiento Dermafreeze sólo lleva unos minutos.
Vea a continuación las instrucciones de uso paso a paso.

Conjunto de tubos
Para ensamblar el tubo, retire el sello (sólo en la versión Dermafreeze 210) e inserte el tubo de extensión en el actuador, asegurándolo de forma segura.

  1. Análisis de lesiones¡ATENCIÓN!
    EL ANÁLISIS DE LESIONES SIEMPRE DEBE SER REALIZADO POR UN PROFESIONAL DE LA SALUD CERTIFICADO.
    La primera etapa del proceso de criocirugía implica el análisis de la lesión.
    Un análisis adecuado es esencial, ya que determinará el tipo de aplicación, el número de chorros y las sesiones que se utilizarán.
    En general, las lesiones más comúnmente tratadas con Dermafreeze y otras técnicas de criocirugía son: melanosis solar, verrugas, queratosis, lesiones genitales (incluyendo verrugas y lesiones causadas por VPH) y verrugas plantares.
    Las regiones con piel más gruesa, como la planta del pie o la palma de la mano, por ejemplo, pueden tener un protocolo diferente en comparación con las regiones con piel más fina y sensible, como la zona del cuello y el dorso de las manos, en relación a la cantidad de criógeno a utilizar, el tiempo de burbujeo e incluso el número de sesiones.
  2. Preparación y asepsia
    Encuentre una posición donde el paciente se sienta cómodo y donde la lesión esté en posición horizontal. Dependiendo de la localización la aplicación podrá realizarse con el paciente sentado o acostado.
    Para el procedimiento en la planta del pie, el profesional debe posicionar al paciente de forma cómoda y estable, garantizando un fácil acceso a la zona tratada. Las posiciones más comunes incluyen al paciente acostado boca arriba, con el pie apoyado; sentado en una silla reclinable, con el pie elevado; o en algunos casos, boca abajo si es necesario. La elección depende del tipo de procedimiento, de la comodidad del paciente y de la ergonomía del profesional.
    Para aplicar DermaFreeze, la asepsia debe incluir la higiene de las manos o el uso de guantes desechables y la limpieza del área con agua y jabón suave. Luego, aplique un antiséptico con una gasa estéril, dejándola secar naturalmente antes del procedimiento.
  3. Selección y posicionamiento del aplicador (cono)
    El aplicador se utiliza para limitar la acción del agente criogénico, garantizando que solo se trate la región objetivo.
    El cono debe utilizarse en posición horizontal, evitando aplicaciones en posición diagonal, para que el criógeno actúe de forma homogénea sobre la lesión.
    Seleccione el cono de acuerdo al tamaño de la lesión, dejando un pequeño espacio (aproximadamente 1 mm) alrededor de la lesión.
    Colocar el cono alrededor de la lesión con una ligera presión, de manera que no se produzca fuga del agente criogénico, y también de manera que no cause molestias al paciente (ya que la región puede estar sensible debido a la lesión).
    Para lesiones más grandes que los aplicadores, se puede realizar más de un procedimiento sobre la misma lesión, para cubrir toda el área.
  4. Aplicación Jet
    La técnica de aplicación de los jets puede variar dependiendo del tipo y localización de la lesión, así como del número de sesiones necesarias para eliminar cada lesión.
    Con el aplicador posicionado sobre la lesión, inserte el extremo del tubo de extensión contra la pared interna del cono, posicionándolo en diagonal para evitar salpicaduras.
    Active suavemente el gatillo, aplicando chorros cortos sobre la superficie inclinada del actuador, con una duración aproximada de 1 s cada uno. Será posible verificar la acumulación del agente criogénico en forma líquida en la parte inferior del aplicador, mientras se produce burbujeo sobre la lesión.
    Para que el procedimiento sea más efectivo, es importante que el criógeno se burbujee durante aproximadamente 45 segundos, con el objetivo de lograr que todas las células de la lesión alcancen una temperatura de menos 20°C. Mantenga el cono en posición hasta que se complete el proceso de burbujeo. Después de burbujear, podrás ver la capa de hielo sobre la lesión.
  5. Post-procedimiento
    Luego del procedimiento, espere a que la lesión se descongele naturalmente.
    IMPORTANTE: A LESÃO NÃO DESAPARECE IMEDIATAMENTE. EM GERAL, O TEMPO PARA A LESÃO CAIR NATURALMENTE É ENTRE 7 E 14 DIAS.
    La apariencia de la lesión después del procedimiento puede variar dependiendo del tipo de lesión y región.
    Inmediatamente después del procedimiento, el área puede volverse blanquecina, seguido de enrojecimiento y una ligera hinchazón.
    Al cabo de 24 a 48 horas puede aparecer una ampolla transparente o rojiza que en los días siguientes se transforma en una costra. En un plazo de dos a cuatro semanas, la costra se desprenderá y dejará al descubierto una piel renovada, que puede cambiar de color temporalmente.
    No es necesario colocar un apósito sobre la lesión tratada. El uso de ungüentos o cremas solo debe realizarse si lo recomienda un profesional de la salud.
  6. Regreso después del procedimiento
    Por lo general la devolución se realiza en un plazo de 14 días. Sin embargo, el intervalo puede variar dependiendo del protocolo adoptado por el profesional.
    Al regresar, hay 3 escenarios posibles. Si la lesión ha desaparecido después de la 1ª sesión, el procedimiento está completo y no serán necesarias sesiones adicionales. Si la lesión ha disminuido (pero no ha desaparecido por completo), se debe realizar una nueva aplicación de Dermafreeze para continuar el tratamiento. Si no hay ningún cambio en la lesión, es posible que se haya aplicado muy poco producto sobre la lesión. En este caso se debe revisar el tiempo de acción del criógeno (burbujeo).